Chutney de Piña de los Azores con Malagueta Picante
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Descripción
El Chutney de Piña de los Azores con Malagueta Picante meia.dúzia® es una verdadera explosión de contrastes que despierta todos los sentidos, ideal para los amantes de sabores picantes e intensos. Elaborado con Piña de los Azores - fruta de origen protegido y reconocida por su sabor intenso y aroma tropical inconfundible - este chutney combina la dulzura exótica de la fruta con la osadía de la guindilla, creando un condimento vibrante, fresco y picante.
La textura jugosa de la piña se equilibra con la acidez delicada del vinagre de arroz y el toque cítrico de la ralladura de cítricos. La guindilla y el jengibre aportan capas de calor e intensidad, mientras que las pasas unen todos los elementos con una dulzura sutil que suaviza el picante sin apagarlo. El resultado es un chutney artesanal portugués lleno de personalidad e intensidad aromática.
Más que un acompañamiento, este chutney es ideal para crear experiencias gastronómicas atrevidas. Armoniza a la perfección con quesos de cabra frescos o con la cremosidad de un queso brie, realza platos de carne de vacuno a la parrilla o de caza, y sorprende como salsa para tacos de pescado o gambas, aportando frescura tropical y un toque picante irresistible.
Este es un condimento que celebra la autenticidad de la piña de los Azores y la osadía de la guindilla, uniendo tradición agrícola e innovación culinaria. Una fusión intensa que transmite los sabores de Portugal en cada degustación.
Uso sugerido
Este Chutney de Piña con Guindilla es un aliado versátil en la mesa, perfecto para crear contrastes atrevidos y equilibrados. Su intensidad combina especialmente bien con quesos de cabra frescos, donde el toque tropical y picante realza la frescura del queso, y con la cremosidad del queso brie, en la que el calor de la guindilla rompe la grasa y enriquece la experiencia.
En platos de carne, se convierte en un complemento sofisticado. Realza la jugosidad de un filete de vacuno a la parrilla con frescura afrutada y añade exotismo a las carnes de caza, equilibrando sabores intensos con notas dulces y tropicales. Cada combinación resulta en un plato más rico y memorable.
En las opciones más creativas, este chutney artesanal brilla como salsa para tacos de pescado o gambas. La fusión entre el dulzor de la piña, el toque cítrico y la intensidad picante crea una experiencia gastronómica irresistible, capaz de transformar recetas sencillas en momentos inolvidables.
Ingredientes
: Piña de los Azores (73%), azúcar, vinagre de arroz (puede contener sulfitos), pasas, jugo de cítricos, malagueta (1%), jengibre y ralladura de cítricos. Preparado con 55g de frutas por 100g.
Origen de las materias primas
Declaración Nutricional, Por 100g: Energía, 455 kJ/ 107 kcal; Lípidos, 0,2 g / 0,0 oz; de los cuales ácidos grasos saturados, 0,2 g / 0,0 oz; Hidratos de carbono, 24,4 g / 0,9 oz; de los cuales azúcares, 24,0 g / 0,8 oz; Proteínas, 0,5 g / 0,0 oz; Sal, 0,0 g / 0,0 oz.
Alérgenos: puede contener sulfitos.
Origem das materias - primas
La Piña de los Azores DOP (Ananas comosus L. Merril, variedad Cayena) es una fruta emblemática que refleja la identidad agrícola de la isla de São Miguel. Producida en invernaderos de vidrio mediante métodos tradicionales —como la aplicación de “humos” y el uso de “camas calientes” a base de materia vegetal—, su cultivo es un proceso exigente que tarda alrededor de dos años desde la plantación hasta la cosecha. El resultado es una fruta de calidad excepcional: forma cilíndrica ligeramente afilada, cáscara de tono naranja intenso y una pulpa amarilla translúcida, de sabor agridulce inconfundible y aroma tropical intenso. Introducida en São Miguel en el siglo XIX, conquistó rápidamente Europa, convirtiéndose hace más de cien años en una de las frutas más exclusivas y distinguidas de Portugal.
La guindilla, con su color rojo vibrante y sabor punzante, es conocida por el picante característico que despierta los sentidos y provoca una agradable sensación de calor. Sus semillas liberan compuestos que estimulan endorfinas, promoviendo placer y bienestar, al mismo tiempo que aceleran el ritmo cardíaco y aumentan la temperatura corporal. Considerada uno de los ingredientes más afrodisíacos de la gastronomía mundial, la guindilla aporta al chutney artesanal profundidad, intensidad y atrevimiento, creando un contraste irresistible con la frescura tropical y dulce de la piña.